Fuente: Xinhua / Guillermo Arias
Como siempre, es bueno poner en perspectiva la situación de Venezuela. La producción petrolera sigue decreciendo, la capacidad de refinación está disminuida, al igual que la generación eléctrica, con serias restricciones en el ámbito de la transmisión y de la distribución, a todos sus niveles. Con esa referencia y siendo mono productores/exportadores petroleros, los ingresos serán los resultantes de multiplicar 550.000 barriles diarios promedio, productores de flujo de caja, esperados para 2018, por un precio promedio (relativamente estable que no depende del país) de U$ 60. También están los pagos de la deuda externa vigente, más los montos que se van acumulando de la vencida. Esa limitación en los ingresos, es la causa de que haya escasez generalizada y la consecuente inflación de oferta, potenciada a su máxima expresión por una emisión desmedida de bolívares que la convirtió en hiperinflación desde julio del año pasado y que como tal, nada parece detener el espiral.
Las reservas operativas no son suficientes y no hay fuentes de financiamiento disponibles, con la excepción hecha de algunos pocos empresarios que están importando con sus propios fondos para algunos bienes y servicios que a veces no entendemos como aun están presentes en nuestra economía. Si se flexibilizara el mercado cambiario con unas reglas más o menos estables, esta última fuente podría multiplicarse.
La situación social de mucha y creciente pobreza, no se ha convertido en explosiva porque está contenida por mecanismos diversos de control social, que termina transformándose en control político. Será cada vez más difícil gobernar esta situación si no se produce un cambio de modelo. Y como todo hace pensar que por el momento eso no ocurrirá, entonces la situación social irá empeorando hasta introducirse en la estructura misma del chavismo. Con solo Claps, subsidios y misiones, el país no es sustentable.
Y en cuanto a lo político, como les vengo diciendo desde el segundo semestre 2017, el chavismo ha ido y seguirá incrementando su poder institucional interno a tal grado, que en los próximos meses no habrá institución que no sea chavista (o las que queden serán pocas e irrelevantes): tales como las nuevas monedas, la nueva constitución, los partidos legalmente registrados y todos los poderes públicos, entre otros. Este no es un buen momento para pretender ganarles la presidencia…esa posibilidad casi no existe. Y digo casi, por aquello de los disrruptores que pueden ocurrir un día de elecciones.
Qué pasaría si la gente, el 80% que cree que el presidente no lo está haciendo bien, saliera a votar en contra…sin acuerdos previos, sin liderazgo visible…un “efecto cardumen” que podría hacer coincidir a una gran marea humana en salir a votar, lo cual significaría votar por HF, así no les guste HF. El cardumen se mueve guiado por algún disparador común a cada individuo…un depredador, alimento, cambio de temperatura…todos reciben el mismo estímulo y actúan en consecuencia…por diseño…porque a todos les pasa lo mismo, todo el tiempo…Y en nuestro caso como humanos, no se piensa ni se razona, sino que se actúa…se vota en contra.
Todo hace pensar que no ocurrirá, pero si ocurriera, ese día podrían cambiar muchas cosas…excepto el poder absoluto y las redes de control, que estarán más activas que nunca…a menos que ese día, las redes tampoco respondan. No es un escenario de media o alta probabilidad, pero es un escenario posible que abriría a partir de ese momento un nuevo juego que generaría una nueva cadena de eventos. Hay que esperar a ver si la señal débil que esto es ahora, se fortalece más a medida que avanzan los días. El 20M está muy cerca, pero a la vez pueden pasar muchas cosas.
La semana que pasó se caracterizó por las discusiones entre economistas sobre si dolarizar o no dolarizar. Tal vez poniendo demasiado énfasis en el lado monetario, cuando nuestros problemas son de la economía real…no olvidar que la inflación (eje del discurso propositivo) es un síntoma y no una causa…es la fiebre del enfermo…ahora, las causas de la fiebre, esas si son el problema y de eso no se habla mucho. Y cuando se refieren a PDVSA se refieren al flujo de caja, cuando este también es un resultado…sin economía real, tampoco hay flujo de caja.
La introducción no pretende oponerse a la discusión, por el contrario, es la primera vez en muchísimo tiempo que se comienza a poner “sobre la mesa” la posibilidad de revisar el modelo actual. Críticas ha habido muchísimas, pero propuestas, esas recién ahora están comenzando. Y digo comenzando pues es como el estiramiento y el calentamiento muscular antes del ejercicio…hace falta más tiempo y más ideas. Y también más ángulos…planificar un país es mucho más que déficit fiscal o salario promedio…es principalmente gente…es lo social, lo reputacional, lo comunicacional. Es la confianza perdida que demorará años en ser recuperada y ocurrirá lentamente si se van haciendo bien las cosas…sino demorará mucho mas. Es también pacto político de gobernabilidad pues si bien sabemos que con el chavismo las cosas no van a cambiar, sin el chavismo tampoco lo harán…en esto estamos todos juntos y ellos aun son una fuerza cohesionada muy importante.
De las propuestas opositoras me preocupa la sobre simplificación de algunos conceptos que se emiten…es como si al ponerlo en una lámina de power point ya el problema estuviera resuelto. Años de ver repetir los mismos errores ya nos debieran haber enseñado que en nuestro país, el “cómo” es más importante que el “qué”. Y no se habla mucho del “cómo” harán las cosas que proponen, y se sigue apelando al realismo mágico…tal vez políticamente les pueda dar algún beneficio a corto plazo, pero los resultados han demostrado ser catastróficos en el tiempo.
Político
El chavismo sigue cohesionado y eso no cambiará para el 20M. Y la oposición sigue dividida y eso tampoco parece que cambiará. A menos que haya un “efecto cardumen”.
Pero el poder que sigue acumulando el gobierno, no es capaz de modificar la realidad objetiva de deterioro que se sigue expandiendo e invadiendo los ámbitos más privados y exclusivos del chavismo. El chavismo duro también va siendo penetrado por la realidad. Pero eso no tendrá efecto inmediato…tomará tiempo, pero lo hará. Claro que siempre podría ocurrir (también probabilidad baja) que el 21M el reelegido presidente NMM anuncie medidas de corte liberal y flexibilice en algo los controles y permita un reabastecimiento transitorio que a su vez le permita retrasar la penetración.
La palabra transitorio en este contexto, significa que a estas alturas ya hay daños estructurales que no pueden revertirse solo con medidas de flexibilidad…por eso es que políticamente el chavismo alcanzará el pico del poder con la toma de la AN antes de julio de este año, pero desde allí lo que queda por delante será disminución progresiva de ese poder. Y esto será así pues está construido sobre bases relativamente débiles, que representan más o menos el 30% de respaldo, lo cual si bien es importante para ganar una elección, no es suficiente para impulsar una revolución…y menos una revolución dentro de la revolución que es lo que está ocurriendo desde el 1ro de agosto de 2017 con la ANC. Requiere de mucho más del 30%…y no tiene como conseguirlo…más bien irá perdiéndolo y al compensar respaldo con control, acelerará esa pérdida de sustento.
La oposición por su parte sigue dividida entre dirigentes y opositores, entre abstencionistas y posibles votantes…y HF. Esos cinco grupos no se hablan entre sí…de hecho la dirigencia opositora está desaparecida, los opositores no saldrán a la calle para apoyar o rechazar nada, y algunos de ellos irán a votar el 20M a riesgo de las críticas de los vecinos. Más bien la sensación es que si nadie va a reconocerla, entonces para que ir a votar.
El exterior, liderado por EEUU, sigue concentrando la iniciativa opositora esperando (me imagino) que alguien adentro haga algo con ese marco de presión. Desde el exterior solamente no habrá resultados. Si no hay alguien (persona o grupo) que asuma la dirección, será un sufrimiento interno (el resultante de las sanciones y de la presión) sin propósito definido. Creo que está claro que el llamado a los militares no funcionó (por ahora, como dijo HChF) y la sociedad civil como dijimos está desmotivada.
El trabajo de HF está sirviendo para sembrar el germen de la campaña…lo está haciendo siguiendo el “librito” y está motivando el pensamiento renovador…preguntarse dólar o no dólar, PDVSA si o PDVSA no, salario mínimo más alto, tarjetas “mi negra” o “carnet de la patria”…y así se van cubriendo los temas lento y sin profundidad. Pero se va produciendo una agenda sobre la que habría que trabajar para que, junto con una reorganización interna y al desarrollo de la visión del país que se quiere, produzca una hoja de ruta que incluya una elección que sea aceptable para todos los públicos, internos y externos. Esta evidentemente no lo es pues está dirigida a ese chavismo duro el cual sin dudas saldrá a votar, mientras que la oposición no lo hará.
Social
Puede dividirse entre la gente que se va, la que planifica irse, la que quisiera irse (pero no puede) y la que se queda. El último grupo es el que puede asumir una reconstrucción…a todos sus niveles. El resto está tan concentrado en sobrevivir afuera, en planificar su salida y en quejarse, respectivamente, que tal vez no pueda contarse directamente con ellos. El último grupo deberá hacer las cosas para revertir aquello que sea reversible…pero la realidad es que la sociedad que sale a trabajar todos los días es la que mantiene activo lo que usamos y consumimos todos los días.
Los indicadores socio emocionales coinciden en que la tristeza es el factor que podría resumir lo que ocurre. Tiene la característica de que genera inacción, y cuando ese es el humor social, no se puede esperar cambios desde este ámbito. Pero no son indicadores eternos…las cosas cambian…mutan…el efecto cardumen se aplica a todos ellos…así estén tristes.
Cuando se hablaba de negociación política estaba claro para estos análisis que no era viable, pues las negociaciones se producen solo después de los colapsos, de una fractura social profunda…que pueda llevar, no a unas mesas de negociación en las que “creían” unos pocos, sino a aquellas mesas que fueran el reflejo de las partes de una sociedad fracturada. Aun hay que transitar la parte de la fractura social para recién entonces tratar de repararla…vía la negociación.
La alternativa a lo anterior, es que no haya dos partes con poder suficiente como para negociar, sino que una de las partes se vaya desmoronando y en definitiva quede solo una para buscar una reorientación que nos saque de la catástrofe en la que nos encontramos…
Económico
En la introducción de este informe hay un buen resumen. Sin mayores novedades, Petro y nuevo cono avanzando, dólar libre caotizado y sin referencias, Dicom insuficiente para ser tomado en cuenta, incertidumbre sobre qué pasará con el negocio petrolero en Venezuela y casi certeza de que la infraestructura eléctrica será una fuente inminente de problemas.
Los bonos se siguen negociando exitosamente aunque ese “éxito” no se refleje en el país. Solo sirve para contener la avalancha de juicios y embargos que podrían desatarse si se declaran en default. Cada vez el atraso es mayor (no hay mucha información) y se habla del orden de los 2 mil millones de dólares.
La discusión pública sobre planes económicos podría ser una fuente de información para el gobierno para revisar su propio plan. En definitiva, en lo personal, no creo que ni la línea monetarista, la fiscalista o la intervencionista, ninguna por sí sola, será una solución para Venezuela. Debemos tomar un poco de cada una.
Cuando me gradué de economista en la UCAB, el profesor de Macro, el padre Aguirre, nos decía que el economista, como el plomero, sale a la vida con una caja de herramientas y debe usar cada una según el caso del que se trate. Sin ideologías. Si cuando ese economista abre su caja solo encuentra un martillo, entonces procederá en consecuencia…Es de esperar que los economistas que están discutiendo estos temas tengan una mayor variedad de herramientas y que sepan cómo usarlas.
Para las empresas la recomendación sigue siendo prioritizar las funciones de:
- Logística, apoyando y asegurando la cadena de suministros en un ambiente altamente recesivo
- RRHH, para identificar y armar los grupos críticos con los que manejar la operación en casos de crisis
- Tesorería, con el criterio de ser el lente con el que se “lea” la empresa desde los costos, gastos, ingresos y rentabilidad
Por lo demás, el país seguirá achicándose y bajando las barreras a la entrada de la inversión. Las oportunidades son muy grandes y deben ser identificadas y aprovechadas. La ventana de oportunidad está más cerca que antes de cerrarse. Ahora hay que verlas con sentido de urgencia pues no durarán abiertas mucho más.
Hay que tener una hoja de ruta para transitar esta nueva etapa, pues un mal paso podría hacer explotar una “mina” en el “campo minado” en que se ha convertido nuestra economía…y perder el esfuerzo de haberse mantenido tanto tiempo resistiendo.
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